La rutina perfecta debe incluir protección, hidratación y reparación. En la búsqueda de una piel saludable y radiante, muchos productos de cuidado de la piel prometen resultados milagrosos. Sin embargo, no todos los ingredientes son iguales. Los antioxidantes, el ácido hialurónico y el retinol son tres ingredientes comunes que han demostrado en numerosos estudios clínicos que son beneficiosos para la piel de múltiples maneras. En este artículo, explicaremos por qué la rutina perfecta debe incluir como mínimo estos tres ingredientes.
Antioxidantes: protección contra los daños causados por el estrés oxidativo
Los antioxidantes son ingredientes que ayudan a neutralizar los radicales libres, que a su vez son moléculas inestables que se producen naturalmente en nuestro cuerpo como resultado del daño celular causado por la mala alimentación, el trabajo, el alcohol, la contaminación, la exposición al sol y otros agentes externos. Los radicales libres pueden dañar las células de diversos órganos y también las de la piel y acelerar el proceso de envejecimiento.
Los antioxidantes ayudan prevenir el daño celular. La vitamina C es el antioxidante por excelencia para el cuidado de la piel y el que cuenta con mayor cantidad de estudios científicos que lo avalan. En dichos estudios se ha visto que la cantidad mínima de vitamina C que debe tener una fórmula para que produzca los efectos positivos deseados en la piel es un 8%. Es importante buscar cosméticos con altas concentraciones de activos para beneficiarse de una cosmética verdaderamente eficaz. Además de su capacidad para neutralizar los radicales libres, la vitamina C también estimula la producción de colágeno y puede ayudar a unificar el tono de la piel y reducir la apariencia de manchas oscuras.
Otros antioxidantes que se encuentran comúnmente en los productos para el cuidado de la piel incluyen la vitamina E, el ácido ferúlico, la niacinamida y el resveratrol. Al elegir productos para el cuidado de la piel que contienen antioxidantes, es importante buscar productos que sean estables y se hayan formulado de manera adecuada para garantizar que los antioxidantes sean efectivos. Y es recomendable que se combinen varios de estos antioxidantes en la misma fórmula para que se potencien y conseguir la máxima eficacia. El Serum Antiox de Método R por ejemplo combina vitamina C libre, vitamina C liposomada, ácido ferúlico y vitamina E.
Ácido hialurónico: Hidratación y volumen
El ácido hialurónico (AH) es un ingrediente hidratante muy utilizado en productos para el cuidado de la piel. Se presenta en 3 versiones diferentes con distintas funciones. Bajo, medio y alto peso molecular. El AH que se encuentra naturalmente en nuestro cuerpo, especialmente en nuestra piel y tejido conectivo. Actúa como un humectante, lo que significa que puede ayudar a retener la humedad en la piel y mantenerla hidratada.
El AH de bajo peso molecular es pequeño y capaz de penetrar en la piel, principalmente en su versión liposomada. En su versión de medio y alto peso molecular actúan como oclusivos para prevenir la pérdida transepidérmica de agua. Ambos son interesantes y, de diferente forma, cumplen la función de hidratar la piel.
A medida que envejecemos, nuestros niveles de ácido hialurónico disminuyen, lo que puede llevar a una piel más seca y menos firme. Al agregar ácido hialurónico a nuestra rutina de cuidado de la piel, podemos reponer los niveles de humedad en nuestra piel y ayudar a mantener su apariencia juvenil y suave.
Además de sus propiedades hidratantes, el ácido hialurónico también puede ayudar a mejorar el volumen y la plenitud de la piel. Esto se debe a que, cuando se aplica tópicamente, el ácido hialurónico puede penetrar en la piel y unirse a las moléculas de agua, lo que aumenta el volumen de la piel. Aunque siempre recomendamos tener expectativas realistas con respecto a los cosméticos, un cosmético nunca conseguirá los mismos efectos que una técnica de estética.
Todos los pasos de la rutina Método R contienen ácido hialurónico. Creemos que la hidratación es tan importante, que no se debe perder una ocasión de fomentarla.
Retinol: Una solución para prevenir y retrasar el envejecimiento
Los retinoides son derivados de la vitamina A que se encuentra en numerosos productos para el cuidado de la piel que promueven la juventud y que también cuenta con una amplia bibliografía de estudios científicos que demuestran su eficacia. Se ha demostrado que es efectivo para reducir la apariencia de líneas finas y arrugas, así como para mejorar la textura y unifica el tono de la piel. Aunque no todo vale. Para conseguir los efectos biológicos positivos en la piel, debe tener una concentración mínima de 0,25%. Y su versión liposomada ha demostrado tener mucho mejores resultados.
Con el paso del tiempo nuestra piel se hace “perezosa” y la producción de nuevas células de piel (queratinocitos) se ralentiza. Por eso decimos que los retinoides reparan la piel. Funcionan reactivando y acelerando la renovación celular y la producción de colágeno. También ayudan a reducir la apariencia de manchas oscuras y a suavizar la textura de la piel. Al agregar retinoides a nuestra rutina de cuidado de la piel, podemos mejorar su apariencia general y reducir los signos visibles del envejecimiento.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que los retinoides pueden ser irritantes para algunas personas, especialmente si se usan en concentraciones demasiado altas o con demasiada frecuencia. Es importante seguir las instrucciones del producto y hablar con un dermatólogo si tiene alguna preocupación. Si empiezas a usarlo por primera vez, se recomienda empezar de forma gradual, combinándolo con una crema para pieles sensibles. En Método R creemos en los resultados duraderos y esos se consiguen con paciencia y constancia. Nuestras cremas Slow-Aging Confort y Slow-Aging hidratación, ambas con Retinyl liposomado, son ideales para conseguir resultados excelentes, sin los indeseados efectos adversos de los retinoides.
La combinación perfecta
Si bien cada uno de estos ingredientes por sí solo puede ofrecer beneficios notables a la piel, cuando se combinan, pueden ofrecer aún más. La combinación de antioxidantes, ácido hialurónico y retinol en una rutina de cuidado de la piel puede ayudar a prevenir el daño celular, hidratar y voluminizar la piel, y reducir los signos de envejecimiento.
Al crear una rutina de cuidado de la piel que incluya estos ingredientes, es importante prestar atención a la calidad y la formulación de los productos que se utilizan. Busque productos que sean estables y se hayan formulado de manera efectiva. También es importante recordar que la consistencia es clave: los beneficios de estos ingredientes se acumulan con el tiempo, por lo que es importante ser constante en el uso de los productos.
En resumen, al incluir antioxidantes, ácido hialurónico y retinol en nuestra rutina de cuidado de la piel, podemos ayudar a proteger la piel del daño celular, hidratar y voluminizar la piel, y reducir los signos visibles del envejecimiento. Si bien cada uno de estos ingredientes puede ser beneficioso por sí solo, su combinación puede ofrecer resultados notables y una piel más saludable y radiante.