Mucha gente nos pregunta por qué hemos insistido tanto en incluir tantos activos hidratantes y antiinflamatorios en los productos de Método R y por qué hablamos tanto de ello. No podríamos explicarlo sin hablar del TEWL.
TEWL es la pérdida transepidérmica de agua (transepidermal water loss). Hay una conexión directa entre la barrera cutánea y el “TEWL” y en consecuencia, la penetración de los cosméticos en la piel.
Una de las cosas más interesantes que vimos cuando hicimos el estudio de eficacia de Método R fue que todos los casos de intolerancia, que fueron muy pocos, se dieron en personas que no usaban cosméticos y tenían la piel muy deshidratada.
Nuestra piel nos conecta con el mundo exterior para lo bueno y lo malo. Lo malo es que es la parte de nuestro cuerpo que recibe toda la radiación y la polución y con el paso del tiempo, su superficie a la que llamamos barrera cutánea se va deteriorando. De hecho se deteriora más en las zonas más expuestas.
Barrera cutánea en la piel
Una de sus principales funciones de la barrera cutánea es retener la mayor cantidad de agua posible dentro de la piel, ya que una piel bien hidratada funciona de manera óptima. Y si se deteriora la barrera que guarda esa hidratación, independientemente de la cantidad de agua que bebas, ese agua se pierde y la piel se deshidrata.
Los expertos en cuidado de la piel sabemos que la barrera cutánea es de suma importancia cuando se crea una rutina de cuidado de la piel. Debe ser siempre lo primero que se tiene en cuenta y estar presente en todos los pasos de la rutina.
- La correlación es tan sencilla como Alto índice de pérdida transepidérmica de agua = barrera cutánea comprometida.
- Barrera cutánea comprometida = mayor penetración de ingredientes activos, patógenos y alérgenos
Una barrera cutánea deteriorada no sólo conduce a una mayor pérdida de agua sino también a una mayor absorción de los ingredientes y mayor probabilidad de intolerancias o incluso de padecer enfermedades de la piel. Además de presentar un aspecto apagado y no uniforme.
Por ese motivo, las personas con la piel muy deshidratada, no pudieron usar la rutina Slow-Aging de Método R. Aunque nuestra rutina Slow-Aging está formulada para maximizar la tolerancia, una piel deshidratada permite la penetración tan directa del producto que la piel reacciona siempre.
En resumen, las personas con piel sensible, sensibilizada o con acné, podrían tener una experiencia negativa con cualquier tratamiento que contenga activos más potentes, lo que llevaría a su interrupción y, como es lógico, a la falta de resultados.
Principios activos en la rutina de Método R
Por ese motivo hablamos tanto de ello y hemos priorizado la presencia de activos hidratantes en todos los pasos de la rutina Método R. Y si crees que ese es tu caso y tienes la piel deshidratada, no te desesperes. ¡Tiene solución! Nuestro consejo es hacer una cura de hidratación primero durante una o dos semanas, con productos específicos para piel sensible y sin activos irritantes, y después de ese tiempo volver a intentar usar el tratamiento con activos slow-aging, eligiendo siempre productos que incluyan activos hidratantes en su formulación.